Después de un forzado año sabático finalmente me reincorporo al trabajo formal y remunerado, así que hoy es el último día en el que podré pasearme como china libre por la ciudad. Estoy contenta y optimista de cara al futuro que por primera vez en mucho tiempo se muestra prometedor.
En un año han cambiado muchas cosas, durante los últimos meses he aprendido más que en muchos años, he crecido y me he vuelto más fuerte. He amado, he odiado, he trabajado con pasión, he luchado por lo que creo y he sembrado mucho de lo que empiezo a cosechar.
Se dice que hoy es el día del blog, seguir blogueando en la época de twitter es para algunos una necedad, para otros es una necesidad. Algunos podemos descuidar estos espacios por semanas, meses o años, pero eventualmente el gusanito de expresarnos en más de 140 vence y volvemos. Nuestros blogs nos reciben sin reproche, nos abren su espacio y nos permiten volcarnos como letras e ideas en ellos. Por eso después de más de 6 años aquí sigo y seguiré.
Mi proyecto alterno en twitter avanza a muy buen ritmo, mi programa de radio funciona cada vez mejor, me invitaron a (y acepté) colaborar en un interesante proyecto de blogs temáticos que me tiene entretenida y ha resultado ser todo un reto (en cuanto lo lancen les cuento más detalles) y estoy en la etapa de planeación de otro proyecto creativo de pin-up que me da mucha ilusión. Como pueden ver estoy bastante entretenida y motivada trabajando fuerte también en aspectos creativos muy alejados de lo que es la ingeniería. Se podría decir que buscando el balance, enfrentando retos y tratando de lograr soluciones originales.
Muy feliz, como hacía mucho no me sentía.
PD. No se pierdan HOY a las 20h por Radio Calaña mi AmargAlletta, hablaremos de tatuajes y tendré por invitado a @VampiroPunk les aseguro será un programa divertidísimo y muy interesante.
Indignación, coraje e impotencia son los principales sentimientos que me despierta la situación actual en México (y si me pongo más dramática, en el Mundo). Ayer en la tarde, después de comer me encontré con la noticia del ataque al Casino Royale en Monterrey, Nuevo León.
Casi de inmediato pude ver a muchos repartiendo culpas, exigiendo a las autoridades que dejen de hacerse pendejas. Reclamo sin duda justo y al que me sumo. Pero hay que ver el panorama más completo y eso es lo que desde ayer en la tarde/noche he intentado hacer en twitter y hoy plasmo en este post.
La grave situación de inseguridad que se vive hoy en México no comenzó hace pocos años, no fue algo que se diera de la noche a la mañana y lamentablemente no es algo que se vaya a solucionar mágicamente de un día para otro.
El crimen no inició con granadazos, grandes balaceras y corrupción en los altos niveles. Es un problema que está en todos los niveles de la sociedad, es algo que vimos de reojo y no hicimos nada, lo dejamos crecer por miedo, hueva, apatía y por pensar que nunca nos iba a tocar.
No son pocos los ejemplos de personas que han alzado la voz DESPUÉS de que se han visto afectados en sus intereses, en su familia, en su persona. Antes de eso simplemente se hicieron de la vista gorda, total "la bronca no es conmigo".
A la sombra de una sociedad permisiva y de una autoridad solapadora el crimen creció y se fortaleció, se hizo parte de nuestra vida, nos acostumbramos a vivir entre pequeños delitos pensando que "no le afectan a nadie". De tanto verlo nos hicimos ciegos.
A las autoridades de los 3 niveles de gobierno les ha faltado inteligencia y estrategia para combatir el crimen organizado. Parece que no comprendieran que al ser un problema tan complejo debe ser atacado por varios frentes, que no se puede nada más 'echar bronca a lo pendejo', que la fuerza sirve de poco o nada si no va acompañada de inteligencia y que hay que dar resultados y no simples declaraciones si se espera recibir apoyo de la sociedad.
Pero por otro lado está una sociedad que no quiere asumir su parte de responsabilidad en el problema, muchísimas personas que piensan que las leyes existen sólo para que los otros las cumplan. Gente que piensa que sus actos son demasiado pequeños para inclinar la balanza para uno u otro lado.
Una persona no va a cambiar al país, el cambio lo tenemos que hacer entre todos. Nuestros actos (correctos o no) se van sumando y al final sí marcan la dirección que toman las cosas. Negarte a hacer lo correcto "porque nadie lo hace" además de irresponsable es bastante idiota y es parte del problema.
Comprarle droga a un narcomenudista, comprar productos piratas, comprar productos robados, acudir a antros irregulares, dar mordidas (aunque sean $20 a oficial de tránsito), acudir a puteros, dejar de denunciar un delito, etc. son 'pequeños' actos que multiplicados por millones de mexicanos se traducen en un 'millonario apoyo' al crimen organizado.
Si la gente deja de consumir piratería entonces el vender piratería deja de ser negocio. Si la autoridad no hace nada por quitar a los vendedores de piratería pues hagámoslo nosotros, convencer a la gente que el 'ahorro' que tienen al comprar productos piratas lo estamos pagando todos (ellos incluidos) en forma de violencia e inseguridad.
Si la gente deja de comprar drogas ilegales entonces vender drogas ilegales deja de ser negocio. Aquí no se trata de un asunto moral de si es bueno o malo meterte cualquier sustancia, el asunto es que al darle dinero al narcotráfico ayudas a comprar sus armas y a sobornar a las autoridades. A título personal siempre he pensado que en algún momento se deben de legalizar las drogas, que eso no será una solución mágica pero es parte de las cosas que se tienen que hacer, pero mientras sea ilegal y con la situación actual es bastante irresponsable y casi criminal seguirle dando recursos al narco.
Si la gente deja de ir a puteros entonces la trata de personas con fines sexuales deja de ser negocio. El problema no es que pagues por 'tirarte' a alguien, el problema es que esos 'negocios' operan al margen de la ley, se mantienen abiertos gracias a la corrupción de las autoridades y la complicidad de los clientes.
Si la gente deja de acudir a antros ilegales (incluidos sitios de juego ilegal) pues tener ese tipo de lugares deja de ser negocio. Incluso hay lugares aparentemente legales que sirven para lavar dinero.
Muchas personas dan mordida para ahorrarse un trámite largo y/o engorroso, las autoridades corruptas lo saben y por eso cada vez lo hacen más largo y engorroso para que frustrada y desesperada la persona decida entrarle a la corrupción y 'arreglarse' con el funcionario. Para muchos es una práctica tan común que ya la tienen hasta considerada en sus gastos "Es que hacerlo sin mordida es imposible, me voy a tardar 10 veces más tiempo" y así, por ahorrarse tiempo siguen alimentando a un sistema decadente. Para un funcionario al que hoy se le hizo fácil aceptar "pa'l chesco" mañana se le va a hacer fácil aceptar más por asuntos cada vez más delicados. Como dije anoche en twitter "Yo prefiero perder todo el día en un trámite a perder la vida a manos del crimen organizado".
Algo similar ocurre con las denuncias, a la mayoría nos da flojera presentar una denuncia, el trámite por lo general es muy complicado, tardado y te tratan de la rechingada
Todos somos parte del problema, pero por lo mismo todos somos parte de la solución. No, las cosas no se van a resolver rápido, fácil y gracias a los demás, las cosas sólo se pueden resolver entre todos. Y con entre todos me refiero a autoridades fuertes que cumplan con su trabajo Y sociedad responsable que cumpla también con sus obligaciones. Hay que exigir que nuestros funcionarios hagan su chamba, pero también vamos a exigirle al amigo, al vecino, al familiar que jale parejo, que no le de recursos al crimen organizado y que no siga solapando a las autoridades corruptas.
Si sólo nos limitamos a exigir que se acabe la corrupción 'en las altas esferas' pero seguimos pasándole una 'corta' al oficial de tránsito que nos para por pasarnos un alto pues las cosas no van a mejorar nunca.
Cada quien, desde su trinchera, tiene que hacer lo que está en sus manos para sacar al país del hoyo. Influir en su entorno cercano. Exigir a autoridades que cumplan con su deber. Todo lo anterior, porque tenemos que atacar por varios frentes, porque aceptar nuestra responsabilidad en la descomposición de nuestra realidad no exime a los demás de la suya. Todos somos tenemos parte de la responsabilidad, pero eso no quiere decir que todos seamos igual de responsables.
Corrupto el que pide mordida. Corrupto el que da mordida. Corrupto el que es testigo de un acto de corrupción y se queda callado.
¿Quieres ser parte del programa más mamerto y quejumbroso de la red? Es muy sencillo, el próximo miércoles 24 de agosto tendremos un programa 'interactivo' y tú puedes formar parte de él.
Sólo tienes que mandarme mention a Alletta con el hashtag #AmargAlletta, contarme tu anécdota más vergonzosa y el título de una canción que consideres tu gusto culpable. Las anécdotas más divertidas formarán parte del programa, la música obviamente estará incluída en el playlist y por supuesto que les daremos su crédito como invitados especiales.
¡¡¡No dejen pasar esta oportunidad de hacer el rídiculo en forma global!!!
NOTA: Debido a que el programa dura sólo una hora, si hay muchas anécdotas elegiré las que a mi gusto en ese momento me parezcan más divertidas, pero las otras podrían ser utilizadas o en un programa posterior o para grabar un podcast que no se transmita en vivo. No acepto dramas o reclamaciones si tu anécdota no fue lo suficientemente jocosa para ser elegida... pero confórmate, hay gente con vidas peores que la tuya :D
Pues finalmente me convencieron y he regresado a la radio por internet. Les dejo el link para descargar el podcast de este primer episodio de la segunda temporada de AmargAlletta que ahora se transmite los miércoles a las 20 horas por www.radiocalania.com
Es momento de resucitar este espacio y no encontré mejor pretexto que mi visita esta semana a Campus Party México.
Siempre me ha gustado mucho el concepto de Ñoñotitlán, y no sólo por las instalaciones, conferencias y talleres sino también por los personajazos que una se encuentra en este lugar.
La fauna local de Campus Party es de lo más variada, es una gran oportunidad para conocer personas de distintas partes del país que se dan cita en el evento nerdoso del año.
Desafortunadamente yo no me quedo a acampar, sólo vengo de 'entrada por salida' pero me doy oportunidad de pasearme entre las mesas saludando gente, iré a algunas conferencias y mesas redondas y perderé miserablemente el tiempo en la red as always.
Estaré también transmitiendo un par de minipodcast cada día y me enlazaré en vivo vía twitcam para dejar memoria de este grandioso evento.
Ya les iré contando las curiosidades que me tope en esta reserva natural de ñoños :D
Cada historia va haciendo suyos ciertos símbolos, una frase, una palabra, un garabato, una canción, un lugar, un elemento, un color, un gesto, una situación. Símbolos que se traducen en la complicidad que todo lo une, complicidad que le da sentido a lo que son.
Las historias son entes vivos, evolucionan, crecen, se separan, se reunen, mueren. No hay dos historias iguales.
Cuando una historia termina sus símbolos se quedan flotando en el aire, al acecho, como potenciales detonadores de cascadas de recuerdos, de añoranzas. Te toman por asalto y te mandan de vuelta a un pasado compartido... porque las historias no son tuyas, las historias les pertenecen a todos los protagonistas por igual.
Pero a veces pasa que llega alguien más, sin saberlo toma uno de esos símbolos y lo reinterpreta. Lo carga con nuevas memorias y a fuerza de uso se adueña de él. Poco a poco le va drenando los tristes recuerdos antiguos y los va sustituyendo con memorias frescas, menos dolorosas.
Alguna vez leí que la única manera de deshacerte de un mal hábito es la sustitución, porque es más fácil hacerte de un buen hábito nuevo que simplemente dejar un mal hábito. Entonces, el secreto era 'llenar' el espacio/tiempo del mal hábito con un buen hábito que sea incompatible y de ese modo, al cabo de un tiempo y con cierto esfuerzo, el buen hábito acabaría tomando el lugar de aquello que queremos dejar.
Supongo que algo similar funciona para el olvido. No se puede simplemente borrar de la memoria, hay que reescribirle encima. Un día de pronto, te das cuenta que ese símbolo que de inmediato te transportaba a X situación sin importar quien lo emitiera ya no lo hace más, ahora a veces te remite a X, a veces a Y y otras tantas te deja indiferente, el proceso de sustitución ha comenzado.
Los símbolos (como todo en esta trinche vida) resultaron ser de quien los trabaja.
Caminaba por la orilla del abismo demasiado ensimismada para darse cuenta del peligro. ¿En verdad importaba el riesgo de la caída si podía disfrutar del viento revolviendo su cabello? El vacío la atraía con fuerza, la nada reclamaba para sí su cuerpo, y ella dócil, de pie en el acantilado se dejaba desear.
Desde ese punto la tierra parecía postrarse a sus pies, se sentía dueña de todo, abrazada por la nada. Sola, en el pico del mundo sin nada más que sus pensamientos y el viento. Siempre el viento.
Cerró los ojos y sintió el aire que la envolvía, la embriagaba y la poseía. El tiempo se detuvo un breve instante. La brisa entre las ramas de los árboles allá abajo susurraba su nombre, la reclamaba como propia. Y ella tan ausente y tan apasionada del viento se dejaba seducir. Su cuerpo temblaba como hoja en otoño, sabía que su destino era caer, dejarse ir, entregarse al viento y olvidar el resto, poco importaba que iba a pasar después.
Con decisión dio un paso al frente, dispuesta a dejarse tragar por un todo que era nada...
Alguien la detuvo bruscamente de un brazo. "¿Estás loca? Estuviste a punto de perder la vida arrojándote por el despeñadero". Ella volteó, sonrió con tranquilidad y contestó "No pierdes algo que sabes dónde termina", se soltó del brazo que sentía como grillete y se arrojó al vacío.
Solamente alguien que en verdad te importe puede decepcionarte. Por eso no me decepcionan los resultados de un partido de fútbol, las pataletas de los diputados o las estupideces de las 'estrellitas' de la tele. Los primeros me hacen arquear una ceja, las segundas me generan impotencia y las terceras me son completamente indiferentes. Pero cuando la pataleta y la estupidez vienen de alguien a quien quieres la cosa cambia.
Dicen que: "Bienaventurados los que nada esperan, porque nunca serán decepcionados". ¡Qué cierto, pero qué imposible! Por más que sepamos que todas las decepciones vienen de las expectativas que nosotros mismos tenemos de algo/alguien es inevitable que, por costumbre o por anhelo, esperemos que las cosas sucedan de cierto modo... así como inevitable la posterior decepción si nuestras expectativas no son satisfechas.
¿La solución sería no esperar nada de nadie ni de nada? Bueno, en la teoría sí, pero creo estarán de acuerdo que la realidad es un pocoMUCHO más compleja que eso. Esa solución mágica puede funcionar para las cosas sin importancia, para las pequeñas 'decepciones' diarias, para no 'sufrir' por una mala adaptación cinematográfica, o por un terrible final de nuestra serie favorita, pero definitivamente no funciona para las cosas importantes.
Que algo/alguien te importe significa necesariamente involucrarte con, al involucrarte vas a comenzar a esperar que algunas cosas sucedan. Aunque entiendas que no se puede controlar todo en esta vida (mucho menos la mente y el actuar de los demás) necesitas 'confiar' en que algunas cosas van a pasar de cierto modo, que algunas personas van a reaccionar de alguna manera; y así vas generando tu entorno, en el que te sientes cómodo y seguro... y todos necesitamos sentirnos cómodos y seguros de vez en vez.
Supongo que las decepciones son parte de la vida, como los adioses, como el dolor. No intento vivir una vida plana sin emociones y decepciones, sólo espero aprender a vivir sin que el eco de mis expectativas no alcanzadas me atormente eternamente.
Y es así, 34 primaveras se dice fácil, demasiado fácil, tanto que cuesta un poco de trabajo entender todo lo que encierran estos años.
Jamás he pensado en quitarme la edad, para mi cada año de mi vida vale lo mismo, en cada año han pasado cosas maravillosas y cosas malas, he reído, he llorado, he amado, me han decepcionado, me han sorprendido, he conocido gente maravillosa y gente despreciable. Cada año voy siendo una mejor persona, más compleja, más plena, más yo.
Yo no me quito años, yo con orgullo presumo mis 34, levanto la cara y le doy la bienvenida a lo que esta vuelta al sol me traiga.
Por los que llegan, por los que se fueron, pero muy en especial por los que permanecen ¡Saquen los drinks y a festejar!
El sábado fue la reunión anual con los ex-compañeros de la prepa. Como cada año agarré a mi mejor amiga y me lancé con mucho morbo a ver en qué se habían convertido esa partida de rufianes con los que estudié.
Desde larva y hasta la prepa fui una odiosísima nerda, nada de grandes fiestas, ni de muchos amigos, ni de irme de pinta ni mucho menos de salir con nadie.
Estudié en colegios religiosos y buena parte de los años que pasé ahí recluída les compré el cuento. Dedicaba parte de los descansos para ir a misa o a la biblioteca. Siempre estudiando, leyendo y escribiendo. Luego, un triste día la venda se me cayó de los ojos al descubrir la hipocresía de los sacerdotes que dirigían el instituto. Fue al final de la prepa y eso me dejó lista para el radical cambio que sufrí durante mi paso por la Facultad de Ingeniería de la UNAM.
Resulta lógico que aquellos a quienes no veía desde esa época se sorprendan de lo cambiada que estoy, que no me reconozcan y que la mayoría ni me recuerden. Debe ser muy incómodo ver después de años a la chavita a la que molestaban.
A mi me da risa enterarme de lo que ha sido de quienes me agarraban de puerquito, con los años vino la certeza de que no eran ni mejores ni peores personas que yo, que está bien ser diferente, que en realidad nunca fui menos como algunos se empeñaban en hacerme sentir.
Algunos me dan muchísima pena, siguen instalados en su papel de fingir por encajar, sin darse cuenta que al paso de los años las máscaras se ven gastadas y acabadas, que algunos nos damos cuenta que no son tan geniales como quieren aparentar. Algunas poses les resultaron a los dieciséis años, a los treinta y tantos resulta un triste espectáculo... caricaturas de lo que fueron alguna vez.
Es válido (y necesario) que como sociedad le exijamos resultados a nuestros gobernantes. El problema viene cuando nos limitamos a exigir que otros resuelvan el problema sin hacer lo que nos corresponde.
Me parece francamente hipócrita exigir que el gobierno termine con la corrupción 'en las altas esferas' pero seguir ofreciéndole "pa'l chesco" al policía de tránsito que va a multarme por pasarme un semáforo en rojo.
Mucha gente cree que los que pensamos que la sociedad tiene que hacer algo ADEMÁS DE quejarse pensamos también el gobierno no tiene ninguna responsabilidad, y no es así señores. Simplemente entendemos que ni sociedad ni gobierno por separado van a lograr nada, hay que exigir, sí, pero también hay que trabajar.
Pensar que el cambio tiene que venir de arriba hacia abajo es ingenuo. Supongamos por un momento que ponemos en una posición alta a una persona congruente, honesta y preparada; si no lo dotamos de un buen equipo de trabajo no podrá hacer gran cosa, las mañas, los malos manejos, los vicios seguirán incrustados en el sistema, intocables.
Es cierto que un líder inspira, pero no todo en la vida es inspiración, podríamos tener al más honesto y valiente jefe de policía del mundo, pero eso no nos garantiza que el oficial no aceptará el soborno que le ofrece un chófer para evitar la grúa se lleve el carro. Es más, casi podría apostar que aunque el jefe fuera el más transparente seguirían existiendo quienes, sin pruebas, lo acusaran de corrupción por motivos meramente políticos.
Por eso es que pienso que el reclamo no sólo debe ir hacia el gobierno, debe ir también hacia la sociedad. ¿Estamos tan hasta la madre de todo como para dejar de dar mordidas? ¿Estamos tan hasta la madre de todo como para respetar las leyes? ¿Estamos tan hasta la madre de todo como para preguntarnos qué estamos haciendo mal como ciudadanos?
El problema de fondo es, como lo he dicho desde hace mucho tiempo, la educación. La responsabilidad del gobierno es, en todo caso, proveer formación académica, no educación, y es justamente aquí cuando entramos en conflictos. Conozco varios casos en los que los padres esperan que las escuelas 'eduquen' a sus larvas, padres que se ofenden cuando una les dice que le pueden exigir a la escuela que les enseñe a sus larvas a leer, a escribir, a realizar operaciones aritméticas, pero no pueden esperar que en la escuela aprendan a comportarse como seres civilizados si no es lo que se ven en casa.
Por más clases de ética, civismo o democracia que tuviéramos, si en casa reina la ley del gandalla no batalla, el lema del que no tranza no avanza, pues no vamos a llegar a ningún lado. Hay que empezar por aprender y enseñar a asumir la responsabilidad de nuestras acciones.
Cada que me preguntan "¿y tú que haces por mejorar la situación?" les respondo que procuro respetar la ley, no dar mordidas para acelerar trámites, no fomentar el comercio informal. A muchos se les hace poco, pero estoy segura que es más de lo que la mayoría de la gente hace... y creo que a la larga debe trae más beneficios que salir a cerrar calles. Y no sólo es que yo cumpla con eso, en mi entorno procuro convencer a la gente que me rodea de hacer lo mismo.
Sí, el gobierno no está cumpliendo con lo que le toca, pero nosotros como sociedad tampoco. Si hoy se te hace fácil dar una mordida, mañana si llegas a ser funcionario se te va a hacer fácil recibirla... y luego exigirla. En la mente de muchos es una especie de 'compensación', un "pues cuando yo estaba abajo me fregaron, ahora que tengo la oportunidad voy a fregar a otros". Y así, al final, aunque cambie el gobierno, aunque cambien los actores, seguiremos teniendo los mismos vicios.
El cambio verdadero debe venir de abajo hacia arriba, de adentro hacia afuera. La honestidad y congruencia de la sociedad civil deben ser los cimientos para un buen gobierno... lástima que a tantos esto se les olvide cuando llegan a posiciones de influencia.
Anoche recibí un comentario en el post de las cuentas regresivas que me ha dejado pensando, y como yo pienso mejor por escrito me lo voy a traer y luego de eso armo el post de hoy.
Luis E dijo...
Me gustó, sin embargo, siento que faltó poner la contraparte, las cuentas regresivas en las cuales procuras por todos los medios llegar al punto 0. Desde lo más banal como podría ser un periodo vacacional, un domingo, etcétera, llegando a momentos como el saber que estás con la persona que amas por una última vez, y saber que en realidad es una última vez y un último día y unas últimas horas. Y esto puede ser por muchas razones, por mutuo acuerdo, por diferencias de planes, viajes con boletos de ida solamente y hasta una muerte anunciada.
Perdona que haya venido a amargar así tu post, supongo que es mi mood de esta noche =/.
Pero independientemente de mi embarradota de lodo, me gustó mucho esto que escribiste.
Personalmente no suelo hacer cuentas regresivas para que termine algo que disfruto, ¿perder mucho/poco tiempo que dure algo bueno pensando en su final? Los fines de semana, las reuniones con amigos, las vacaciones, etc. se disfrutan sin pensar en el tiempo que falta para que terminen... en especial cuando has hecho una cuenta regresiva para llegar a ese punto.
Ahora el tema de las últimas veces. Siempre he pensado que es mucho más fácil planear las primeras veces de algo, una primera cita, un primer beso, un primer viaje a algún destino; la cosa es que no es así de fácil planear una última vez... vamos, ni siquiera reconocerla para esperarla.
Gandalf dice: "Ni el más sabio conoce el final de todos los caminos". Y esa se ha vuelto parte de mi filosofía de vida. Podemos despedirnos, alejarnos, dar asuntos por acabados, pero en el fondo no sabemos si en verdad es "la última vez".
"La última vez" por lo general nos sorprende después de un tiempo, justo en el momento en el que volteas y piensas: "si yo hubiera sabido que ESE era el último beso que iba a darle lo hubiera tomado con calma, lo hubiera visto a los ojos, lo hubiera hecho eterno".
Aún con muertes anunciadas no podemos crear cuentas regresivas, no conocemos el instante preciso de la muerte, así que la espera es la agonía de la incertidumbre, siempre pensando que cada momento puede ser el último y no dándonos cuenta que en verdad era el último hasta que ya pasó.
Siempre podemos planear un comienzo, por lo general los finales nos sorprenden sin que los veamos venir. Podemos saber que están cerca, pero no el momento justo en el que van a ocurrir.
Por otro lado los únicos finales definitivos que existen vienen con la muerte, hasta que los protagonistas mueren no podemos dar por terminada su historia, nunca sabes las vueltas que puede dar la vida y la forma en la que personajes de tu pasado que creías completamente fuera de tu vida pueden regresar... con otros roles, formando nuevas historias.
Quizá sea tonto pero pienso que los únicos adioses se dan en los funerales... y el otro nunca podrá escucharlos, hasta ese momento son simples "hasta que nos volvamos a cruzar, mañana, en años, o nunca jamás".
Adoro las cuentas regresivas, la emoción, la expectativa, el nervio. Hay veces que no importa tanto el suceso como la espera, la planeación, el anhelo.
La ilusión por lo que vendrá, así nunca ocurra, el sueño, el deseo. El tener un motivo para seguir, una razón para avanzar en la dirección que hemos decidido.
Por todo eso, y con cualquier pretexto, inicio cuentas regresivas... me emociona ir tachando el día a día, el contar minutos, el ver los avances hacia el momento X.
Porque una cuenta regresiva no tiene que ser simplemente una espera pasiva, una cuenta regresiva puede ser un control de avances, una motivación.
Hay cuentas regresivas de segundos (como las campanadas de fin de año), de días (como en la que estoy metida rumbo a mi cumpleaños), de meses (como cuando planeas un evento grande como una boda, esperas un nacimiento) o incluso de años (como cuando alguien a quien quieres se va a estudiar a otro lugar, pero sabes que algún día volverá). No puedo decir que prefiera las cuentas regresivas cortas a las largas o al revés, todas para mi tienen ESA emoción que eriza la piel, acelera el pulso y corta la respiración cuando se acercan a su final.
Porque el éxito no es sólo llegar a la meta sino disfrutar el camino, nunca hipotecar el presente por un futuro incierto. La cuenta regresiva, a diferencia de la meta, nos permite saborear cada paso, cada pequeño avance, cada minuto, cada respiro. Ves 'el final' como aquello que te motiva para recorrer el camino, pero disfrutas cada checkpoint, cada hoja que le arrancas al calendario, cada segundo que ves pasar, y cuando estás por cruzar la meta en tu mente suena
No entiendo a quienes se quitan los años, yo amo cada uno de los casi 34 años que estoy por cumplir. Y sí, me emociona que se acerque mi cumpleaños. Ciclos, una vuelta más al sol, un tomo más de mi vida, un nivel del videojuego.
Lo acepto, para mi las fechas guardan un simbolismo muy cabrón, cada año tiene sus 'checkpoints' en los que me permito hacer una pausa, analizar el camino y 'guardar la partida' rumbo al siguiente. La 'batalla final' de cada nivel se realiza justo el día de mi cumpleaños, el 'jefe' son los recuerdos acumulados y la idea es 'vencerlos' para poderlos hacer parte de mi vida, ligarlos íntimamente a mi. Buenos y malos recuerdos luchan hasta que los vuelvo un 'todo' manejable, un equipaje con el que me es cómodo viajar.
Me preparo para la batalla de este nivel, sé que será perfecta, intensa, apasionada, difícil, divertida, pero como dijeron anoche en Sucker Punch"You are afraid. Don’t be. You have all the weapons you need."
Ok, sí, este post quedó muy influenciado por la película de anoche... y eso que no según yo ni me gustó tanto, no deja de sorprenderme la forma en la que la escritura me permite conocerme un poco más... a pensar en ello.
Temporada de festejos formalmente inaugurada. Renté una salita privada de cine y el sábado invite a unos droogies a ver A Clockwork Orange. Sin duda es una de mis películas favoritas pero nunca la había visto en nada más grande que una televisión, así que digamos fue un festejo sumamente especial. "It's funny how the colors of the real world only seem really real when you viddy them on the screen."
La eterna discusión acerca del libre albedrío volvió a mi mente. Estamos tan acostumbrados a poder elegir que ya ni notamos la fuerza que el hacer una elección tiene. Y no hablo únicamente de las grandes decisiones de la vida, me enfoco más en esas pequeñas elecciones que hacemos de forma automática y que a lo largo de nuestra vida nos van definiendo y formando muchas veces sin darnos cuenta.
Muero de pena por el baño en vino
No creo en un mundo de buenos contra malos, amo la complejidad de los individuos para mezclar en una sola mente bondad y maldad de forma tan irrepetible y única que esa mezcla se convierte en la esencia de cada quien.
La libertad de elección es la auténtica libertad, acertar o cometer errores, pero hacerlo porque seamos nosotros quienes así lo elijamos. ¿Qué chiste tiene ser 'bueno' si no tenemos la posibilidad de ser 'malos'? No hay virtud sin elección. Se habla mucho de valores 'universales', a mi me parece chocante el término, no hay nada universal, en todo caso serían valores 'culturales'. Pensar que, por poner un ejemplo simple, orientales y occidentales compartimos un conjunto de valores universales es una reducción ridícula. Incluso valorando 'lo mismo' los motivos que nos llevan a apreciarlo suelen ser distintos.
Siempre una plática fenomenal
Para entender lo qué se valora es indispensable entender el por qué. Y es justo aquí donde tuerce la marrana el rabo, porque muchas veces a duras penas entendemos el por qué valoramos nosotros algo como para venir y entender las motivaciones de los demás. Entonces damos por hecho que todos van a valorar las mismas cosas que nosotros, de la misma manera y por los mismos motivos, en ese marco repartimos juicios, condenamos o perdonamos, hacia afuera, sin entender, sin que nos interese siquiera conocer un poco más allá.
Ya es uno de mis consens
¿Toda la violencia es mala? El mundo es un lugar hostil, para sobrevivir algunas veces hay que reaccionar violentamente hacia algún peligro. Existimos algunos que somos más explosivos y viscerales que otros. ¿Qué pasa si estuviéramos impedidos a reaccionar de ese modo? ¿Cuánto tiempo sobreviviríamos? ¿Cómo puede alguien externo poner mis límites sin conocer mis circunstancias? ¿Eso podría ser llamado vida?
¿Hablaba yo de personas favoritas?
Y esto lo extrapolamos a todas las aristas del carácter. Hemos sido moldeados por nuestra historia, somos lo que hemos sido, como dice en su blog la vieja cabrona de Dana Corres"Causa y efecto"... elecciones, elecciones y más elecciones. Tal parece que cerca de mis 34 años tengo un radar para todo aquello que me hable de la importancia de las elecciones y del poder que tenemos sobre ellas. No hay coincidencias, no existen las coincidencias.
No coincidences
Lo cual me lleva a otro hilo. Ayer vi V for vendetta. Era otra de las películas que competían por ser las elegidas para proyectarse el sábado en mi festejo. Básicamente perdió porque ésta sí la había visto en pantallota. Y me sigue retumbando en la mente la frase: "There are no coincidences, Delia... only the illusion of coincidence."
Todas las 'casualidades' que han estado presentes en mi vida los últimos meses me han llevado a redescubrir grandes cosas, a volver a escribir con pasión, a regresar a mi cámara, a volver a ser un poco más lo que nunca deje de ser pero había olvidado... un maravilloso descubrimiento... serendipia.
Gracias por hacerlo posible
He hablado mucho de lo simbólico que es este cumpleaños para mi... y todo se va acomodando como debe ser. Estoy disfrutando de los últimos días, gozando cada detalle que descubro, buscando 'señales' como si fuera parte de un rally cuya meta son los 34. Así, al cruzar la meta debería de ampliarse ese horizonte, debería de descubrir un mundo nuevo, ver las cosas como nunca antes. Porque hoy yo también soy mejor persona de lo que era hace unos meses, porque he descubierto en mi algo que creía perdido.
Creo que sólo me resta agradecer a quienes me acompañaron el sábado SuperIU y Theegirl, ElAhui, Artasanchez y Cholaholic (dobles gracias amé la Alice y el vino), DrReneMD (gracias por la Alice, no tiene un gramo de madre), Jacksparrintong (gracias por la película ^^), Andypolo1 y su marido, Anipeto y Vanchamarch, Bulletproofdork, FridaLeona y su galán, Lobatio y su esposa, Rolanddt, Bitalicious, Sr_LuisEnrique, Darthcrowley y su galana. Neta droogies, sin ustedes no hubiera sido ni la mitad de chido el festejo :D
Cuando las jacarandas pintan suelo y cielo de magnífico morado y su perfume invade la ciudad es momento de prepararse, de detenerse un momento y recordar: ¡YA VIENE MI CUMPLEAÑOS!
El mundo debe amarme para obsequiarme cada año con los más hermosos árboles en flor. Porque ustedes no lo saben, pero todas las jacarandas de este mundo me pertenecen... me pertenecen y yo les pertenezco.
De ellas robe el andar jacarandoso, el donaire, la desenvoltura. Porque nada provoca más suspiros que sus flores acariciándome cuando se apresuran al suelo. Las jacarandas me aman pues, cual galantes caballeros, me ofrecen su capa de flores para que pase sobre ella. Me aman y yo las amo.
Sus flores como lágrimas, como caricias, como suspiros, como recuerdos. Su aroma que se me clava en el alma, en la memoria, en los anhelos. Su color que me embriaga, que me acompaña y no me abandona, sus ramas secas después de haberlo entregado todo.
Un día cualquiera te devora la ausencia y no dices ni "mu".
Alguien me dijo "estar a la distancia no es realmente estar"... Me cuesta trabajo estar de acuerdo por completo con esa afirmación, claro que hay veces que deseamos contar con alguien con sólo extender la mano, pero hay veces que se prefiere una respuesta profunda a una respuesta inmediata.
La 'inmediatez' a la que nos está (mal)acostumbrando la red es peligrosa, antes mandabas una carta y esperabas pacientemente la respuesta, hoy pulsas el send y esperas al primer F5 obtener un mensaje de vuelta.
No niego que me frustra revisar El Correo cada día en busca de respuestas a mensajes enviados y no encontrarlos, pero usualmente cuando aparece la respuesta ansiada te das cuenta que valió la pena la espera, que hay por quienes siempre vale la pena esperar.
Incluso hay veces en las que no esperas respuestas sino señales, señales de que tú le haces tanta falta como esa persona a ti, que cuando se quiebra desea tenerte a su lado, pero particularmente certezas de que también se quiebra, que también te necesita, que dependen el uno del otro para mantenerse a flote a pesar de todo y de todos. Certezas de que siguen siendo, en algún nivel, los mismos de siempre aunque haya cambiado todo tanto, aunque hayamos cambiado tanto.
Conforme pasan los años nos volvemos complicados, ya no somos simplemente nosotros, ahora somos nosotros y nuestras circunstancias, tan buenas o tan malas como cada historia, sumando y restando.
Nada supera el hablar de frente con esa persona, el perderte en su mirada, el colgarte como koala, el sentir su tibieza, olerle... pero mientras no podamos estar cerca me seguiré conformando con enviarle mis letras y esperar las suyas de vuelta, cuando el momento sea propicio, como un ridículo sustituto de su presencia, hasta que la vida nos coloque de nuevo en el mismo escenario.
Porque el extrañarle no permite el olvido, aquí, hoy y siempre, hasta que pueda volver.
Hoy que volví a oír su voz, a hablar con él, no puedo dejar de pensar en lo maravilloso que es haberlo encontrado en mi vida. Mis ojos se inundan, pero no es un llanto amargo, son lágrimas serenas, de emoción, de reencuentro.
Hacía muchos años que no oía su voz, que no lo veía torcer los ojos cuando intentaba hilar una frase, que no me perdía en su sonrisa. Hacía muchos años que dejé de verlo esconder la cara entre sus manos cuando le fallaban las palabras, que dejé de oírlo balbucear ideas.
Nuestra relación nunca fue típica, un par de raros surfeando por la vida, a veces juntos, otras distanciados, pero siempre unidos. Creo que nadie como él para entender lo que no digo, para compartir los silencios, para deshebrar los sueños, para querer sin límites ni etiquetas.
Frente al él nunca necesité fingir ser mejor de lo que soy, siempre pude mostrarme tan vulnerable y sin miedo. No voy a negar que en algunos puntos de nuestra historia nos hicimos daño, pero es que es imposible querer tan intensa y tan profundamente sin herirle y sin herirte, sin sellar con dolor pactos mudos. Quizá el secreto fue que nunca tuvimos intención de lastimar al otro, lo entendimos y lo aceptamos como parte de nuestra imperfecta naturaleza.
Me sorprende que caminos tan distintos nos lleven al final a conclusiones tan similares, me emociona saber que aunque no somos los mismos que éramos cuando nos conocimos seguimos siendo parte uno del otro, en el hoy, en el pensamiento. Porque hemos aceptado que el pasado forma parte de nosotros, pero que todo lo que tenemos es este instante, el instante en el que decidimos ser, tener conciencia del otro.
Quisiera eliminar la distancia para poder volver a perderme en sus abrazos que me anclan al mundo, ya habrá tiempo, ya llegará el momento. Hoy mis letras van para el hombre que nunca ha dejado de estar, porque desde aquí lo reconozco parte importantísima de mi vida, para el más querido de mis amigos: GRACIAS, TE QUIERO.
La vida esta hecha de instantes, de frases aisladas con las que tejemos historias. Es mentira que seamos escritores de nuestra vida, en realidad somos editores, decidimos que momentos iluminar, cuales recordar entre sombras, buscamos el soundtrack perfecto para enfatizar el momento, añadimos efectos especiales, mostramos pasajes enteros en cámara rápida y nos deleitamos enfocando detalles, agregamos ecos a palabras que nos marcaron y silenciamos el barullo que no aportaba nada.
Me pueden robar o destruir los objetos pero, al final del día, aún me quedan los recuerdos, esas memorias que no pueden arrebatarme aunque quieran. Los momentos que se grabaron, para bien o para mal, en mi mente y en mi alma. Porque soy una con mis pensamientos, porque estoy formada de instantes que son mis recuerdos.
Y esas memorias, esos recuerdos están tan a la vista de todos pero completamente fuera de su alcance. Son mi lugar seguro, mi refugio contra el mundo, mi ancla, mi vela y mi paracaídas. Son lo que soy, tan intangibles como fieles a la realidad que conozco. Tan yo con pinceladas de todos aquellos que han sido importantes en algún momento; como una barda que he pintado y en la que he invitado a unos cuantos a plasmar sus firmas, haciéndolos míos, poseyendo por un breve instante su esencia y dejándolos ir, incompletos y alterados, con menos de sí mismos y una pizca de mi.
Después de todo, mi mente es una compleja red tejida por varias manos, una pintura comunitaria, una obra de un colectivo que sólo me pertenece a mi.
"Cuando te dije que pensaba que eras el hombre de mis sueños
no me refería a que protagonizaras mis pesadillas..."
Hace meses estoy intentando escribir una especie de cuento, la frase con que inicio este post se encuentra apilada en un block de notas junto a otras que planeo utilizar en algún momento del mismo. Como lo más seguro es que ese cuento nunca vea la luz, y esa frase me gusta tanto, la rescato para el blag, ahora que he estado escribiendo tanto de sueños y pesadillas.
Pocas cosas me alteran tanto como los sueños recurrentes, pensé que estaban enterrados en el pasado, que ya no volvería a soñar una y otra vez con las mismas cosas, pero me equivoque.
De puberta soñaba de forma obsesiva con caer el vacío cuando fallaba mi cuerda de rappel. Unos años después mi sueño recurrente era empezar a girar sobre mi eje hasta comenzar a flotar y la desesperación de no poder volver al piso, tratar de tranquilizarme y mediante respiraciones descender, para en el momento de 'hacer tierra' salir de nuevo dispara hacia el techo como pelota de playa.
Siempre he tenido una fijación con el viento, con el aire. Mis pesadillas recurrentes también tenían que ver con aire, con vacío, con volar/flotar. De algún modo aprendí a lidiar con eso y al paso del tiempo esos sueños se fueron haciendo cada vez menos comunes.
Pero ahora una nueva familia de pesadillas me ha agarrado de bajada, hoy los ambientes no son de aire, ya no es el viento mi cómplice, mi amigo/villano. Estos días quien me atormenta durante el sueño es el agua, me envuelve, me ahoga, me impide moverme.
Estoy en un parque, parada frente a una gran fuente, me acerco a la orilla y veo un calendario flotando. El calendario está medio deshojado, sé que las fechas que se ven son significativas por alguna razón pero al despertar no recuerdo que fechas son. Me acerco a la orilla, pienso que los papeles en el agua le dan una imagen horrible y decido entrar vestida en la fuente para sacarlos. Entonces el agua comienza a subir de nivel hasta cubrirme casi por completo, las hojas del calendario se me pegan en la cara y no me dejan respirar, incluso puedo sentir que las hojas, como si de mil manos se trataran, me empujan hacia abajo. No puedo gritar, no puedo ver, no puedo respirar. Todo se pone en blanco, siento un dolor en el pecho y despierto agitada y asustada.
No importa si es el sueño nocturno o una ligera siesta a media tarde, la pesadilla regresa una y otra vez, cada vez más frecuentemente, cada vez más aterradora. Hay veces que postergo la hora de dormir por el miedo que me da volver a soñar con esa fuente. Supongo que tendré que buscar una fuente parecida a la de mi sueño y meterme en ella para demostrarme que las fuentes no pueden lastimarme.
Lo gracioso del asunto es que amo las fuentes y me niego a que un triste sueño me arrebate ese gusto.
Lo maravilloso de los seres humanos es su complejidad, sus matices, sus detalles. No hay personas 100% buenas y personas 100% malas, todos tenemos una combinación de bondad/maldad.
Querer ver el mundo en blanco y negro, en buenos contra malos, es una pendejada tremenda. Creerte que tú eres de los 'buenos' y que todo aquel que en algún tema tenga una opinión contraria a la tuya es de los 'malos' y debe ser destruído pues ni se diga.
Siempre he pensado que lo que más me enriquece como persona es tener discusiones o debates con quienes piensan distinto que yo. Esos que me obligan a cuestionar mis creencias una y otra vez, a ajustarlas, a mejorarlas.
Al final no se trata de que el otro termine pensando justo como una, sino buscar puntos en común, señalar debilidades en los argumentos del otro, aceptar fallas en nuestras ideas y comprender un poco mejor la complejidad en la que vivimos.
Tener creencias tan firmes que ni las evidencias puedan derrumbar no es una virtud, es fanatismo, necedad, estupidez y clara señal de que has dejado de usar tu cerebro para pensar. Todo en esta vida es cuestionable.
Si quieres en verdad aprovechar un debate o discusión deja tus dogmas guardados y lánzate a dudar hasta de tu propia existencia, al final saldrás fortalecido.
No importa si eres de derecha, izquierda, liberal, conservador, hombre, mujer, rico, pobre, alto, bajo, creyente, ateo, homosexual, heterosexual... si CREES y ya no PIENSAS eres un imbécil, lamentablemente la estupidez no distingue raza, condición social, estado civil, sexo, credo, ideología, preferencia sexual o edad.
Si dentro de tus ideas hay alguna equivocada aceptarlo no te hace menos, al contrario, no hay que tener miedo a parecer débil por aceptarlo. Incluso hay veces que no es que haya una idea correcta ni una incorrecta, que son sólo distintos enfoques, conocerlos y aceptarlos nos ayuda a crear lazos y puentes con quienes a primera vista parecían rivales. Y así es como se construye, aceptando y entendiendo al otro, esforzándonos por encontrar la coincidencia, discutiendo fondos y no formas.
Dejemos el chisme de lavadero a un lado, busquemos discutir de las cosas que importan, no perdamos tiempo y energía en darle vueltas a declaraciones escandalosas que nada aportan cuando en el mismo lugar se tratan temas más trascendentes.
Como siempre, cada quien es libre de hacer con su vida lo que quiera, pero si conmigo llega uno de esos descerebrados lo voy a tratar como el pendejo que es.
Yo aplico lo que me gusta llamar "La ley del espejo", si llegas con argumentos y discusión respetuosa obtienes argumentos y discusión respetuosa, si llegas con insultos y sin argumentos obtienes burla y toda la lástima que soy capaz de sentir por alguien que no ocupa su cerebro. Es simple.
No me importa lo que piense la gente, para mi Chapultepec es y será siempre un lugar que amo profundamente, pienso que es hermoso y adoro perderme entre sus árboles, fuentes y monumentos.
Hace muchos años de la mano de un gran amor conocí mis rincones favoritos. Se destaca la Fuente de las Ranas, no puedo pasar por ahí, o siquiera recordarla sin que un delicioso estremecimiento recorra mi cuerpo. Desde entonces y hasta hoy, Chapultepec es celoso guardián de una parte de mis memorias más amadas.
Recuerdo también al galancillo alemán a quien le mostré las maravillas que esconde el bosque tras sus rejas. Su cara viendo las fuentes era un poema. Puedo decir con orgullo que su mirada irradiaba más pasión hacia la Fuente de la Templanza que hacia mi. Esas tardes turisteando por el bosque, verlo embobado en el zoológico, o abrazándome en Casa del Lago fueron maravillosas.
Ayer llegué a la Casa del Lago alrededor de las 16:30 h, iba en búsqueda de 3 boletos para el paseo nocturno. Cuando me dijeron que la venta de boletos empezaba a las 17:00 decidí ir a la parte trasera de la Casa del Lago y matar mi tiempo disfrutando de la maravillosa vista.
El aire como siempre me acariciaba y yo dejaba correr mi mente hacia campos de recuerdos agridulces, de otros tiempos, de otros personajes pero del mismo escenario. Todo había cambiado, pero seguíamos siendo el Bosque, el Lago, la Casa del Lago y yo.
Después de esperar como media hora más de lo programado gracias a la desorganización en la taquilla pude salir de la Casa del Lago con 3 boletotes para esa noche. Ya sólo faltaba que llegaran mis dos acompañantes y el plan estaría completo.
No tenía nada mejor que hacer, así que caminé por la orilla del lago y busqué una banca para sentarme como tantas veces, de mi bolsa saqué un libro e intenté leer, pero me fue imposible. El lugar me invitaba más a pensar y vaciar mi mente que a leer y rellenarla.
No sólo vinieron a mi recuerdos de mi pasado en Chapultepec, inevitablemente se mezclaron con historias de mis relaciones con quienes había participado en esas escenas y la curel y morbosa pregunta "¿Qué habrá sido de ti?"
[Aquí pueden oír esta canción]
Después de un tiempo mis pensamientos volaron lejos, a otra tarde, sentada en una banca, contemplando el agua, sola pero en Washington DC, con mi mundo virtual en las manos, a un par de clicks de quien quisiera compartir el momento cuando envié esta foto:
Y recordé que ese día, ahí sentada, envuelta en el frío aire que anunciaba lluvia, mi mente corrió sin freno hasta el Lago de Chapultepec, recordando tiempos lejanos. Estaba tan lejos pero no me sentía sola, mis fantasmas, los más amados estaban allá y ahora descubro que también están aquí, que parece vivieran en el agua de los lagos, en la fusión de estanques, árboles y concreto, que me abrazan y me persiguen pero no se dejan tocar.
Fue entonces cuando tomé una foto más. Hoy las comparo y me sorprende lo similares que son, lo mucho que significan ambos sitios para mi.
Siempre he pensado en mi como una persona de aire, mi más grande pasión la vivo con el viento, pero no dejo de seducirme por el agua, tan presente en cada momento profundo, tan catalizadora de revelaciones, tan común y tan misteriosa.
Y en eso estaba pensando, sin tomar en cuenta el reloj, cuando apareció uno de los guardias del bosque para invitarme amablemente a ahuecar el ala. Yo no quería irme de Chapultepec, por mi mente pasaban opciones como cruzar a buscar un Starbucks o algo así, pero la verdad es que nada se me antojaba, yo quería seguir rodeada de esa magia, de esos recuerdos.
Volví a Casa del Lago y pregunté si podía sentarme por ahí a esperar el paseo nocturno y me dijeron que no había ningún problema, así que me senté en una bardita y entre recuerdos y twittazos esperé a mis acompañantes.
Ya cerca de las 20:00 que es cuando inicia el recorrido llegaron @Jacksparrington y @DrReneMD así que cuando nos entregaron nuestros programas y pases de abordar nos dirigimos al frente de la Casa del Lago para esperar el trenecito que nos llevaría por el bosque.
No voy a ponerme con demasiados detalles del recorrido porque en verdad vale la pena y esperaría que después de leer esto más de uno de ustedes decidiera darse la oportunidad de vivir esta experiencia.
Entre las cosas que diré es que es un espectáculo divertido, muy interesante, pero lo más importante: muy hermoso.
El recorrido pasa por la Fuente de Nezahualcóyotl (no sean mensos y se queden con toda la marabunta, pueden recorrerla completa si se apuran), la Fuente de las Ranas (vayan y luego vienen y me dicen si no es una de las cosas más bellas que han visto), el Ahuehuete de Moctezuma (simplemente imponente), la Tribuna Monumental a las Águilas Caídas (que fue construído para honrar al Escuadrón 201), la Fuente de la Templanza (una de las consentidas de muchos de los que amamos las fuentes), el Audiorama (yo no lo conocía y quedé enamorada), el Obelisco a los Niños Héroes y al Honor Militar, la Fuente del Quijote (sin palabras, no les arruino ese momento) y termina en la Casa del Lago.
Yo agradezco al doc, que fue quien me pasó el dato originalmente, la maravillosa noche que pasé. En parte sí por el recorrido, pero también por la compañía, ese wey rulea el mundito (pero no le digan porque luego se la cree y ni quien lo aguante u_u)
La temporada de paseos nocturnos es muy corta, son los miércoles del 16 de febrero al 27 de abril de 2011 a las 20:00h (excepto el 20 de abril) Hay que llegar al menos 15 o 20 minutos antes.
Tiene un costo de $150, pero a estudiantes, maestros e INAPAM con credencial vigente les descuentan 50 pesotes. Los boletos se venden en la taquilla de la casa del lago como de 10:00 a 15:00 y de 17:00 hasta agotar existencias o que empiece el paseo.
Yo no sentí frío, pero sí recomiendan ir bien abrigados y con zapato cómodo (nada de taconzotes porfa que se van a partir toda la madre en una de esas).
Neta, dense la oportunidad y verán como salen con buen sabor de boca y uno o dos datos nuevos para apantallar pendejos :)
Espero este post los haya apantallado... ah no, ya la cagué >_<