Ni empleo ni amor

Dicen algunos estudios que la mayoría de los mexicanos (o para fines prácticos de quienes viven en México) utilizan la web para buscar empleo o para buscar pareja. También es alto el porcentaje de personas que la utilizan con fines lúdicos, muy pocos la usan para trabajar u obtener información.

Sin duda el mayor uso que yo le doy es diversión, amo los juegos en línea. Pero me gusta pensar que también la ocupo para fines serios como mantenerme informada. Nada como un clavado en la red para conocer los distintos puntos de vista de los temas actuales sin tener que salir y buscar numerosos periódicos y publicaciones, un par de clicks y listo tenemos desde La Jornada hasta el Reforma, pasando por todo tipo de periódicos y blogs que nos permiten conocer tanto los hechos como las opiniones de personas con un amplio espectro de perfiles.

No niego que he utilizado portales de búsqueda de empleo, pero la realidad es que ninguno de mis empleos los he conseguido por ese medio, así que por lo menos en mi caso su efectividad ha sido nula. Claro que te ayudan a conocer como está el mercado, que puestos son los que tienen mayor oferta y un acercamiento a los sueldos ofrecidos.

Finalmente tengo que repetir que no creo en el amor por internet, las cyber-relaciones no las logro comprender, no me cabe en mi cabeza (quizá limitada y prejuiciosa) como alguien jura enamorarse de alguien a quien nunca ha visto, como creen cuando les dicen "te amo" sin ver reflejado el sentimiento en los ojos del compañero (vamos si hasta viendolos a los ojos te pueden engañar...), como sentirte atraído por alguien con quien no sabes si habrá química, sin sentir la chispa que se enciende cuando se acerca. He conocido hombres sumamente atractivos con quien simplemente nunca se dió el click, así que creo que ver una foto no basta para desencadenar todo el enamoramiento. Descontando que todos subimos fotos en las que lucimos bien, donde la nariz no se vea tan estúpidamente grande (así es en la foto no se me ve tan grande como es en realidad, soy una pinocha de carne y hueso y no por mentirosa :P), o donde no hagamos gala del ligero (o no tan ligero) sobrepeso. Buscamos la imagen que nos proyecte como queremos vernos y no necesariamente como nos vemos cada día, y si no encontramos una buena foto pues siempre existe el retoque en photoshop.

Otra cosa es el conocer a alguien mediante internet y que ya la relación se dé en el plano real, pero que empiece en el plano real, eso no lo veo tan distinto a que conozcas a alguien en un antro y ya lo trates en otro plan antes de iniciar una relación.

En lo que si he cambiado mi forma de pensar es en las cyber-amistades, creo que muchas veces por este medio podemos darnos el lujo de ser más abiertos quizá porque no tenemos miedo a herir suceptibilidades o porque en realidad no tenemos un vínculo previo que nos haga autocensurarnos por temor al que va a pensar de mi si le cuento mis más oscuros pensamientos, claro que como dice Kix en su blog el problema viene cuando esas personas se van volviendo parte de tu vida, te empieza a preocupar lo que piensan de ti y dejan de funcionar como válvula de escape para volverse amigos normales.