martes, enero 12, 2010

Castigando la eficiencia

Cuando era estudihambre en la facultad uno de los temas que más conflicto me causaron fue el estudio de tiempos y movimientos. Me parecía muy enfermo calcular basándome en tablas y promedios el tiempo que se debe tardar un operario para realizar una función. Cuando le calculaba el 20% adicional para necesidades físicas me sentía programando la producción de un robot ensamblador y no considerando las condiciones laborales de un ser humano.

Hoy mi punto de vista ha cambiado un poco. Si un obrero es más rápido que los demás y tiene niveles de producción superiores en muchos lugares se le 'premia' con bonos. Algo que sería imposible medir con el estudio de tiempos y movimientos. Pero ¿qué pasa con quienes trabajamos con el cerebro y no con las manos?

Tristemente no hay estudios de tiempos y movimientos para medir la velocidad de crear fórmulas en excel, de resolver problemas, de redactar documentos o de elaborar informes. Por esa razón alguien que nunca ha hecho esa labor no entiende el trabajo que hay detrás de una sencilla hoja que presenta el análisis de una base de datos. Muchos jefes piensan que uno guiña los ojos y el trabajo se hace solo, que las computadoras son mágicas y solo basta que uno se siente enfrente y piense 'quiero esto' para que la máquina entregue el resultado.

Si le piden a alguien un informe que a uno le cuesta 2 días de trabajo y ese alguien usando sus conocimientos y herramientas lo resuelve en 2 horas en lugar de pensar que es una persona eficiente le consideran un flojo porque se pasó 2 días sin hacer nada. Y entonces al eficiente le van sobrecargando de trabajo mientras que los flojos son vistos como personas muy trabajadoras porque hacen muchas horas-nalga.

Por lo regular si un jefe sabe hacer lo que pide este fenómeno no se da tanto. Se valora el resultado y se aprecia la eficiencia. Es cuando hay jefes que te dicen, mira por mí no hagas nada, ponte a jugar (literal un jefe nos dijo así) pero cuando yo te pida algo resuélvelo como lo has hecho hasta ahora. Trabajar por objetivos debería ser la tendencia de las organizaciones para elevar la productividad, así disminuirían los que se hacen pato para entregar sus resultados por temor a 'maleducar al jefe' y que les pongan más trabajo que a los demás.

Recuerdo una vez que alguien me dijo '¿ya terminaste? No se lo vayas a dar al jefe todavía, enfríalo un rato en tu escritorio o se va a dar cuenta que puedes hacerlo más rápido y te va a dar más trabajo' No me molestaba que me dieran más trabajo si no que pensaran que era una floja ¬¬

Espero cada día más jefes se den cuenta que el salario que nos pagan no es tanto por la talacha que hacemos sino por el conocimiento que tenemos y por la capacidad de solucionar problemas y generar cambios productivos, mientras sigan queriendo que no pierdas el tiempo aunque eso signifique ocupar tus horas ociosas en ayudar en el centro de copiado no vamos a llegar muy lejos.

5 comentarios:

chilangoleon dijo...

fecal=lleva=3=anios=y=fraccion=de=horas=
botella=pues=es=un=pinche=briago=pendejo

jess dijo...

Un buen jefe, siempre tendrá un buen equipo.

En cambio, un buen elemento de equipo, no es garantía de tener un buen jefe.

Saludos linda!

El cola E´Flecha dijo...

Por eso yo soy bien ineficiente...

Workaholica dijo...

Yo por eso soy Freelance...

Feliz Año!!!!

Alletta dijo...

chilangoleon: como tantos otros

jess: que cierto lo que pones

abraxas: si ajá :P

w: tus jefes son tus clientes estas peor